5 Poemas sobre Pandora

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Pandora

En un etéreo jardín del Olimpo divino,

donde los dioses tejieron su esplendor,

nació Pandora, un regalo a los mortales,

una caja de sorpresas llena de amor.

Con su gracia y su belleza inigualable,

los corazones de todos conquistó,

su espíritu libre como las olas del mar,

un secreto en su caja que nadie descubrió.

Mas no todo era gloria, ni todo era luz,

Pandora llevaba en sí un gran conflicto,

era la tentación encarnada en mujer,

el engaño del dolor y el destino maldito.

La caja era su carga, su prueba sin igual,

un desafío para su noble corazón,

sabía que la apertura era un riesgo mortal,

pero cómo resistir al llamado de la tentación.

Un día, presa de la curiosidad abrumadora,

atrevióse a abrir la caja temida,

dejando escapar males y desventuras,

una sombra que pronto oscureció su vida.

Pero en medio de la oscuridad infinita,

Pandora encontró la esperanza, su salvación,

un pequeño rayo de luz que la envolvió,

guiándola en su camino por la redención.

Y así, Pandora nos enseña la lección vital,

que en medio del mal siempre hay un rastro de bien,

que las pruebas de la vida son parte de la verdad,

y que la esperanza es lo último que se pierde también.

Pandora: La Caja de las Maravillas

En tiempos remotos, una historia se cuenta,Sobre Pandora, mujer de alma dispuesta,Una caja en sus manos, misteriosa y cerrada,Guardando secretos que el destino le otorgaba.

Con curiosidad y anhelo en su mirar,Pandora no pudo evitar desear,Desatar los hilos de aquel misterio oculto,Sin saber que su acto generarían un tumulto.

La caja, en su interior, no solo escondía bienes,También al mal y sus oscuros despliegues,Cuando Pandora liberó aquellos males,Se extendieron por el mundo sin cabales.

Pero en ese instante, un resquicio de esperanza,Un último aliento lleno de bonanza,Del fondo emergió un ser delicado y pequeño,La esperanza, que enfrentaba el daño con empeño.

Desde entonces, Pandora cargó con la culpa,De haber despertado el mal en la Tierra y su estampa,Pero en su corazón encontró un camino,Enmendar sus errores, sembrando el amor genuino.

Porque Pandora, al liberar el mal en su andar,También dejó espacio para el amor brillar,Entendió que la vida tiene matices y dualidad,Y en esa dualidad reside la belleza de la humanidad.

Así es Pandora, madre del bien y mal,Una mujer valiente que rompió el cristal,En su historia encontramos lecciones sabias,Sobre el poder del libre albedrío y las elecciones bravías.

Por siempre recordaremos a Pandora con amor,Una mujer que desafió su destino con ardor,En su caja se encuentra la esencia de nuestro ser,Una mezcla de luces y sombras, por siempre de qué aprender.