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El corazón de Pinocho
En un mundo lleno de magia y encanto,donde las ilusiones cobran vida,surgió un títere de alma noble,con su nariz de madera, sorprendida.
Pinocho, el valiente aventurero,buscaba con ansias la verdad,con su corazón intrépido y sincero,quería abandonar su levedad.
Con cada mentira, su nariz crecía,un recordatorio de su fragilidad,decidió cambiar su triste osadía,por amor, lealtad y sinceridad.
La hada azul en su benevolencia,otorgó a Pinocho una oportunidad,le prometió que, con paciencia,se convertiría en un niño de verdad.
Perdido en el bosque oscuro y frondoso,Pinocho enfrentó grandes desafíos,pero siguió adelante con valentía,aprendiendo lecciones en su camino.
La astuta zorra y el gato traicionero,intentaron engañar al inocente títere,pero su astucia no fue suficiente,Pinocho escapó con inteligencia esbelta.
En su lucha por ser un niño honesto,Pinocho experimentó el dolor del remordimiento,pero también sintió la calidez del perdón,descubriendo el amor y el arrepentimiento.
Con el tiempo, su nariz dejó de crecer,y su corazón se volvió real y humano,Pinocho encontró la felicidad en su ser,descubriendo el poder de lo sano.
En la historia eterna de Pinocho,se resalta que la verdad es fundamental,que el amor y la rectitud son el derrocho,para encontrar un destino especial.
Así que recordemos con gratitud,la admirable metamorfosis de Pinocho,un símbolo de pureza y virtud,enfrentando la vida con gran derroche.
Pinocho, el muñeco de madera
En un taller de carpintería, un muñeco se creó,
Con madera noble y manos con amor talló.
Pinocho, su nombre, tan especial y único,
Un muñeco de madera que es mágico y lírico.
Su pequeño cuerpo, perfectamente tallado,
Una nariz larga, pero por amor maquillado.
Pinocho, el niño de madera, sueña con ser real,
Buscar aventuras y en el mundo encontrar su ideal.
Por sus travesuras, su nariz siempre crece,
Pero su corazón inocente nunca perece.
Con su amigo Pepito Grillo, siempre le acompaña,
Aconsejándolo en cada esquina, donde quiera que ande.
A través de bosques oscuros y mares turbulentos,
Pinocho lucha por ser honesto y valiente, sin lamentos.
El hada azul, con su varita mágica en mano,
Escucha el deseo de Pinocho y le ayuda a ser humano.
Su nariz de madera se acorta, convirtiéndose en piel,
Y su corazón de madera ahora puede sentir y querer.
En su aventura, descubre que la mentira no vale la pena,
Que ser sincero y amable, el mundo te abre su puerta serena.
Pinocho, el niño de madera, ahora es real y verdadero,
Un ejemplo para todos, de amor y bondad, el más sincero.
Así termina la historia de Pinocho, el muñeco de madera,
Que nos enseña que ser valiente y noble es la verdadera quimera.
Pinocho, el muñeco de madera
En un taller solitario, tallado con esmero,
surgió un muñeco único, de madera sincero.
Pinocho era su nombre, su sonrisa encantadora,
en su corazón, un deseo, de ser un niño con aurora.
Sus ojos brillaban con destellos de ilusión,
y en su alma, anhelaba ser libre sin distorsión.
Geppetto, su creador, le dio vida en un instante,
y con un cosquilleo su cuerpo cobró ropajes elegantes.
Pinocho, con piernas de madera, empezó a andar,
descubriendo el mundo, sin mirar atrás.
Pero su nariz, por cada mentira, crecía,
una enseñanza que en su camino persistía.
Embelesado por la aventura y los placeres,
Pinocho cayó en las redes de malhechores.
Fue atraído por la promesa de riquezas ocultas,
sin saber que su libertad estaba en disputa.
Engañado y sumido en sus propias equivocaciones,
Pinocho aprendería valiosas lecciones.
Con su coraje y su determinación sin fin,
se propuso ser el niño que siempre quiso ser, al fin.
Superando obstáculos y tentaciones nefastas,
Pinocho encontró el camino hacia su alma vasta.
Su nariz dejó de crecer, señal de su transformación,
conquistando así, su verdadera redención.
Hoy Pinocho, el muñeco de madera noble,
inspira a muchas almas a encontrar lo que en ellas se mueble.
En su historia, la esencia de la búsqueda interior,
nos enseña a ser auténticos, con un amor superior.
Mejores Poemas sobre Pinocho para dar inspiración:
Y de la bellota, un pino
pinocho
Desde mi niñez, esa figura de madera
que me acompañó en mis sueños y pesadillas.
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Un día, un hombre me ofreció una oportunidad
de tener una vida mejor, y acepté.
Así, me convertí en un muñeco,
y deambulé por el mundo sin rumbo.
Pero un día, una niña me dio una semilla,
y me dijo que, si la plantaba,
tengo un corazón de verdad.
Así lo hice, y de aquella semilla nació una bellota,
y de la bellota, un pino.
Y ahora, cada vez que la niña me visita,
me cuenta historias de hadas
y yo le cuento las mías.
Alicia MuñOz
estaba feliz de tener una familia
Pinocho fue una vez un niño
Que estaba hecho de madera y no tenía alegría
Fue traído a la vida por un hada.
Pero su nariz siempre crecería bastante peluda.
Siempre se metía en problemas
Porque su nariz crecería cada vez que mintiera
Pero a pesar de que estaba hecho de madera
Tenía un corazón amable y gentil que era bueno.
Un día una niña llamada Geppetto
Lo encontró y lo llevó a casa.
estaba feliz de tener una familia
Pero siempre tuvo miedo de estar solo.
Su nariz crecería cada vez que mintiera
Pero siempre fue perdonado.
porque era de madera
Y tenía un corazón amable y gentil
Aquilino Rivas
Algunos Poemas sobre Pinocho cortos:
Pero ahora eres un hombre
pinocho
Una vez fuiste un niño
Hecho de madera y heno.
Pero ahora eres un hombre
Hecho de carne y hueso
Tu nariz puede crecer
Pero tu corazón es verdadero
Y eso es lo que te hace
pinocho
Betiana Rivero
Que no quería nada más que ser un niño de verdad
pinocho
Pinocho era un niño de madera
Que no quería nada más que ser un niño de verdad
Tenía un corazón bondadoso y un alma valiente.
Pero su nariz siempre crecería
Cada vez que decía una mentira
Pinocho siempre se metía en problemas
Pero nunca se dio por vencido
era un verdadero amigo
Y en el fin
Se convirtió en un niño de verdad.
Remigio Hurtado
porque siempre estás ahí
pinocho
eres un niño pequeño
Hecho de madera y pintura.
Tu nariz crece cuando mientes
pero no te importa
siempre estás feliz
Incluso cuando suceden cosas malas
Porque sabes que no son reales
Y no pueden lastimarte
eres mi juguete favorito
Aunque no seas perfecto
porque siempre estás ahí
Y me haces sonreír
Hasani Beltran