Generador de poemas para una madre difunta
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Para mi madre en el cielo
Madre querida, mi luz en la oscuridad,
Aunque ya no estés aquí, tu amor nunca se va.
En cada estrella te encuentro brillar,
Guiándome, protegiéndome en cada paso que doy.
Tus abrazos, tus palabras de aliento,
Siguen resonando en mi corazón sediento.
Tu sonrisa, tu mirada llena de bondad,
Son recuerdos que guardo con intensa realidad.
Aunque el tiempo pase y la distancia crezca,
Mi amor por ti nunca desaparecerá, madre hecha..
De amor, de sacrificio, de dulzura sin igual,
En cada latido de mi corazón, tú vivirás.
Descansa en paz, dulce madre mía,
Sé que algún día nos reuniremos en la alegría.
Hasta entonces, te llevo conmigo cada día,
En mi ser, en mis sueños, en mi eterna melancolía.
Recuerdo eterno
En mis pensamientos tu imagen perdura,como un cálido susurro en mi alma pura,madre querida, en la eternidad reposas,y en mi corazón guardo todas nuestras cosas.
Tu sonrisa, tu amor, tu sacrificio sin medida,me hicieron crecer con fuerza y con vida,cada gesto, cada palabra, cada abrazo sincero,se guardan en mi memoria como un tesoro verdadero.
Aunque ya no estés físicamente a mi lado,siento tu presencia en cada paso, en cada legado,tu ejemplo de valentía y amor incondicional,me guía día a día en mi senda personal.
Madre querida, en el cielo brillas con luz propia,como una estrella que guía mi camino en la derrota,te extraño, te amo, y en mi corazón siempre estarás,porque eres mi ángel guardián en las noches de soledad.
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Porque allí vive para siempre
A mi madre querida,
que ahora descansa en paz,
le dedico este poema,
con todo mi amor.
madre mía,
te quiero tanto,
que en esta vida,
no puedo vivir sin ti.
Tú eres mi guía,
mi luz en la oscuridad,
mi ángel de la guarda.
Aunque ahora estés lejos,
en mi corazon estas presente,
porque allí vive para siempre.
Te quiero madre,
y espero verte pronto,
cuando llegue mi hora.
Hasta entonces,
guárdame en tu corazón,
porque yo estaré aquí,
esperandote siempre.
Ingeborg Sierra
El amor de una madre es interminable
El amor de una madre es interminable.
Es como una rosa, con sus espinas
Puede hacerte débil, como si estuvieras hecho de vidrio.
Pero siempre te protegerá y siempre durará.
El amor de una madre nunca termina
Es como el sol, tan brillante y tan cálido
Puede hacerte sentir como si estuvieras en la cima del mundo.
Pero siempre estará ahí, incluso cuando te hayas ido
Ignacio Soriano
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Te mando un poema
A mi madrecita querida,
que en el cielo estas;
te mando un poema,
para que sepas cuanto te quiero
y cuanto te extraño.
Madrecita,
te recordaré siempre,
porque fuiste la mejor madre
que uno podria desear.
Siempre serás mi ejemplo a seguir,
y el amor de mi vida.
Descansa en paz,
y que Dios te tenga en su gloria.
Baudilio Perez
Puede calentarte, como si estuvieras hecho de fuego
El amor de una madre nunca termina
Es como una rosa, con sus espinas
Puede hacerte débil, como si estuvieras hecho de vidrio.
Pero siempre te protegerá y siempre durará.
El amor de una madre nunca termina
Es como el sol, brillando intensamente
Puede calentarte, como si estuvieras hecho de fuego.
Pero siempre te guiará y siempre estará ahí.
Juan Guerra
Te extraño mucho
A mi madre querida,
que en el cielo esta,
te quiero decir
que te echo de menos.
Cada dia me pregunto
como seria mi vida
si aun estuvieras aqui,
conmigo
A veces me siento triste,
otras veces enfadada,
pero siempre te quiero,
porque eres mi madre.
Te extraño mucho,
mamá.
Silvina Ortiz
