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Silencio y Soledad
En el eco del silencio se despierta,un susurro sutil de melancolía,la soledad se envuelve en mi alma,y en cada latido, la nostalgia guía.
En la quietud de la noche estrellada,mis pensamientos se vuelven universo,un abrazo de ausencia me rodea,y encuentro en el silencio mi verso.
En cada paso perdido en la neblina,se desvanecen las voces en la bruma,solamente el eco de mis suspiros,me acompaña en esta triste penumbra.
La soledad es un manto frío y sereno,que me envuelve en su abrazo sin final,en cada silencio encuentro consuelo,y la soledad se vuelve mi portal.
En el silencio puedo escuchar mi esencia,las palabras calladas gritan en mi interior,la soledad se convierte en mi amiga eterna,y en cada suspiro, encuentro mi amor.
En la calma del silencio encuentro paz,en la soledad el alma se renueva,me sumerjo en un mar de introspección,y en cada silencio mi esencia se eleva.
Silencio y soledad, compañeros inseparables,me entregan el regalo de la autenticidad,en el silencio y la soledad encuentro mi voz,y abrazo con gratitud esta realidad.
Silencio y Soledad
En la calma profunda del silencio,
resuena la melodía del alma en pausa.
El universo calla, y en su quietud,
encuentro el abrazo del tiempo sin prisa.
La soledad se adueña de mis días,
pero no temo su compañía serena.
Es en el silencio donde encuentro refugio,
y descubro la fuerza que viene de adentro.
Los pensamientos se vuelven susurros,
y el corazón habla sin palabras.
El silencio se vuelve sabio consejero,
que alumbra los caminos oscuros.
En la soledad, danzo con mis sueños,
y observo cómo se despliegan las alas.
El tiempo se detiene en este encuentro,
y puedo ser yo misma, sin máscaras.
El silencio y la soledad me abrazan,
me llenan de calma y serenidad.
No hay miedo ni tristeza en este espacio,
solo paz infinita en cada respiración.
Así, en el silencio y la soledad,
me encuentro a mí misma, en plenitud.
Y descubro la belleza de la quietud,
donde renacen los sueños y la gratitud.
Silencio y soledad
En el manto de la noche, en la quietud del espacio,el silencio se convierte en mi compañero fiel.En la soledad encuentro mi refugio,donde mi alma puede ser libre y serena.
El silencio me envuelve como un abrazo suave,haciendo danzar mis pensamientos en calma.En su silbido encuentro la melodía etérea,que acaricia mis oídos con su encanto misterioso.
La soledad no es tristeza ni desdicha,es el momento sagrado para encontrarme conmigo mismo.Las palabras calladas encuentran su eco interno,y en cada susurro descubro mi propio universo.
En el silencio y la soledad encuentro paz,en medio del bullicio y la vorágine del mundo.Aquí no hay juicios ni ruidos que me distraigan,solo la serenidad que me invita a reflexionar.
En el silencio escucho el latir de mi corazón,susurros que se entrelazan con la brisa suave.Y en la soledad encuentro mi verdadera esencia,la que se pierde en la multitud y las vanidades.
El silencio y la soledad son mis aliados,me acompañan en el andar de la existencia.Son los momentos donde el alma se desnuda,revelando su verdad más profunda y sincera.
Así, en el silencio y la soledad me encuentro,bajo el manto estrellado o en la penumbra de mi cuarto.Son mis instantes de comunión con el universo,donde el silencio y la soledad se vuelven mi hogar.
Silencio y Soledad
En la vastedad de la noche eterna,
el silencio cobra vida y se hace dueño
de los rincones más recónditos del alma.
En la quietud de mi ser, encuentro refugio,
enfrentando mis pensamientos más oscuros,
donde la soledad se convierte en compañera.
El silencio me susurra secretos profundos,
me adentra en un abismo de reflexiones,
donde mi voz interior encuentra su voz.
En el letargo de la noche serena,
siento el palpitar de mi corazón en el silencio,
batiendo en sintonía con el universo solitario.
La soledad me envuelve como un manto,
me invita a explorar mis propios laberintos,
a encontrarme a mí mismo en el silencio.
En el reino del silencio y la soledad,
encuentro la paz que tanto anhelo,
la calma que me reconcilia con el mundo.
En la inmensidad de la quietud me descubro,
renaciendo como una flor en el desierto,
brillando en mi propia compañía silente.
Silencio y soledad, aliados inseparables,
son el telar donde tejemos nuestra esencia,
en la búsqueda eterna de nuestra verdadera realidad.
Silencio y Soledad
En la quietud de la noche estrellada,
donde el silencio pervive sin igual,
la soledad juega con mi alma cansada,
y brota del corazón su más dulce palmar.
El silencio envuelve mis pensamientos,
me susurra secretos al oído,
mientras la soledad se lleva los lamentos,
me abraza y acaricia con su abrigo.
En el silencio encuentro la armonía,
me calmo y encuentro la verdad,
la soledad me guía a la sabiduría,
y me enseña a disfrutar de mi libertad.
El silencio me enseña a escuchar mi ser,
los latidos de mi corazón en calma,
la soledad me invita a poderme entender,
a vivir en paz y sin ninguna alma.
En el abrazo del silencio y la soledad,
encuentro la paz que tanto anhelo,
me sumerjo en su esencia y verdad,
y en su compañía encuentro consuelo.
Así, en esta danza de silencio y soledad,
mi espíritu se eleva y se libera,
descubriendo la felicidad,
en la profundidad de mi propia espera.
Silencio y Soledad
En la vastedad de la noche oscura,
donde el silencio se hace sereno,
me envuelvo en la paz que perdura,
y me encuentro a solas con el invierno.
Soy testigo de la quietud sagrada,
donde el mundo se detiene a suspirar,
y mi alma se adentra, tímida y callada,
en este océano de soledad, sin naufragar.
El silencio acuna mis pensamientos,
mientras bailan en danza silente,
refugiándome de todos los tormentos,
en este refugio donde nada se siente.
La soledad, mi musa y compañera,
me susurra melodías en el viento,
guiándome hacia la esencia verdadera,
donde los secretos se vuelven aliento.
Es en el silencio y soledad donde encuentro,
la fuerza para seguir mi propio sendero,
y en cada palmo de este vasto desierto,
aprendo a amarme y ser mi propio consuelo.
Así, en el silencio y soledad me elevo,
descubriendo la belleza que en mi habita,
y en cada verso que en silencio escribo,
encuentro mi voz, en la quietud infinita.
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En la madrugada,
cuando todo el mundo está dormido,
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me siento en mi cuarto
y contemplo la soledad.
La soledad es una compañera fiel,
que siempre esta ahi,
esperando a que le haga caso.
La soledad no es triste,
es un lugar donde descansar
y encontrar la paz.
La soledad es mi amiga,
que me acompaña en mis días
y me permite ser libre.
Joel Vila
Soy la quietud en el aire
Soy el silencio que te envuelve,
Soy la soledad que sientes.
Soy el espacio entre las notas,
Soy la quietud en el aire.
Soy la tranquilidad que anhelas,
Soy la paz que necesitas.
Soy la calma en la tormenta,
Yo soy la fuerza en tu debilidad.
Soy el amor que olvidas,
Soy la esperanza que pierdes.
Soy el recuerdo de un tiempo pasado,
Soy el sueño de un mañana mejor.
Soy el silencio y la soledad,
Soy el espacio entre las notas.
Soy la tranquilidad que anhelas,
Soy la paz que necesitas.
Candela Luna
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Elías Soler
Soy la calma del mar
Soy el silencio que te envuelve,
Soy la soledad que encuentras dentro.
Soy la quietud de la noche,
Soy la paz del día.
Soy el espacio entre las notas,
Soy la pausa en la canción.
Soy el silencio del bosque,
Soy la calma del mar.
Soy la quietud de las montañas,
Soy la serenidad de las estrellas.
Soy el silencio del universo,
Soy la soledad de tu alma.
Gala Ruiz
En silencio, estoy completo
En silencio, estoy completo
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En soledad, estoy en casa
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Aquí es donde soy libre
Archie Vega
