5 Poemas de una Hija a su Padre Fallecido

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A mi amado padre en el cielo

En el infinito azul de tu morada,mi corazón te busca y no halla nada.Tu partida dejó un vacío en mi ser,pero sé que aún sigues cerca, puedo ver.

Recuerdo tus cálidos abrazos, papá,tus palabras llenas de amor y sabiduría.Aunque hayas partido, siempre estarás,en cada latido de mi vida, en cada día.

Las lágrimas caen al recordar tus risas,tus consejos y tus sueños compartidos.Pero sé que eres mi ángel, que me guías,desde tu dulce morada en el cielo bendecido.

Al mirar al cielo estrellado en la oscuridad,siento tu presencia envolviéndome con ternura.Eres mi guía, mi fuerza, mi eterno papá,a través del tiempo y la eternidad más pura.

Me consuelan los recuerdos de tu compañía,las travesuras que juntos solíamos vivir.Aunque el tiempo haya sido breve, mi alegría,es saber que siempre en mi corazón vas a existir.

Perder a un padre es dolor que hiere profundo,pero hoy levanto mi voz para decirte,que tu amor y tus enseñanzas me han hecho ser,la hija fuerte y valiente que hoy puedo lucir.

Aunque ya no pueda verte con mis ojos,sé que estás a mi lado en cada paso que doy.Tu luz me guía y tu amor es mi abrigo,mi padre querido, en el cielo estás hoy.

Gracias por ser mi padre, mi héroe, mi amigo,aunque ya no estés físicamente a mi lado.Tu legado de amor será mi eterno abrigo,hasta el día en que nos reunamos, soñado.

Un poema para mi padre amado

Querido y amado padre, aunque ya no estés aquí,

siempre estarás en mi corazón, mi eterno sentir.

Tu partida fue un amargo golpe en mi existencia,

pero sé que en algún lugar disfrutas de tu trascendencia.

Recuerdo tus brazos fuertes que me protegían,

tus palabras sabias que me enseñaban y dirigían.

Eras mi guía, mi apoyo y mi gran ejemplo,

siempre luchaste por nuestra familia, sin temor ni desprecio.

Hoy solo me queda llorar tu ausencia y extrañarte,

pero sé que desde el cielo me sigues amar y cuidar.

Eres mi ángel guardián que me protege cada día,

y en mis sueños te imagino sonriente y lleno de alegría.

Agradezco a la vida por el tiempo compartido,

por la lección de amor y entrega que me has brindado.

Nunca olvidaré tus abrazos firmes y reconfortantes,

tus consejos sabios y tus gestos siempre reconfortantes.

Eres mi héroe, mi mentor y mi gran orgullo,

tu legado seguirá vivo en cada acto y detalle minúsculo.

Te honro padre amado con este poema sincero,

espero que desde el cielo me escuches y te llenes de un sentimiento verdadero.

Hasta que volvamos a encontrarnos en el más allá,

te llevaré siempre en mi mente, papá.

A mi amado padre en el cielo

Querido padre, pese a que ya no estás presente,tu amor y cariño siguen vivos en mi mente.Aunque te has marchado al cielo lejano,tu recuerdo y tus enseñanzas jamás se han marchitado.

Tu amor, como un faro, siempre me guió,llenándome de fuerza cuando desfallecí yo.Tus brazos protectores, siempre abiertos,me envolvían en un amor eterno.

Aún puedo sentir tus cálidos abrazos,como si fueran una suave brisa en mis brazos.Tus palabras sabias y llenas de aliento,siguen siendo mi guía en cada momento.

Tu partida dejó un vacío en mi pecho,pero sé que no estoy sola en este lecho.Pues tú, desde el cielo, me cuidas con ternura,me envuelves en un manto de amor y dulzura.

Aunque no estés aquí para celebrar mis logros,sé que tu orgullo fluye en los arroyos.Cada paso que doy, cada meta que alcanzo,es un tributo a tu amor y confianza.

Te extraño cada día, mi amado padre,pero en mis pensamientos, siempre estás presente.Tu legado vive en mi corazón fuerte,y por siempre serás mi guía y mi norte.

Descansas en paz en ese lugar de luz,donde el dolor y el sufrimiento quedaron atrás.Que tu espíritu siga brillando en cada estrella,recordándome que nuestro amor trasciende la tierra.

Hasta que nos volvamos a encontrar,guardaré tus recuerdos, como un tesoro a resguardar.En el cielo, sé que nos reuniremos nuevamente,y juntos, para siempre, seremos eternamente.