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El Nacimiento de Jesús
En un humilde establo de Belén,bajo un cielo estrellado al amanecer,nació el niño divino, el Salvador,un regalo de amor del Dios creador.
Un destello de luz iluminó la noche,los ángeles cantaron con gran derroche,los pastores escucharon su dulce voz,y supieron que algo grandioso ocurría en pos.
María, llena de ternura y bondad,envolvió al recién nacido en humildad,José, como padre, lo protegió con amor,y los ángeles bendijeron tal gran honor.
Los magos llegaron con regalos en mano,guiados por la estrella que brillaba en el llano,oro, incienso y mirra ofrecieron al rey,reconociendo su divinidad sin más que ver.
En ese pesebre humilde y sencillo,nació Jesús, nuestro guía y amparo,vino al mundo para enseñarnos el camino,con su verdad y sus palabras claras como el claros.
El nacimiento de Jesús nos trae esperanza,un mensaje de amor y paz en bonanza,celebremos su venida cada Navidad,y sigamos sus enseñanzas con fidelidad.
El nacimiento de Jesús
En un humilde pesebre, en Belén de Judea,La esperanza del mundo, el Mesías, nacía.Los ángeles cantaban en coro celestial,Anunciando la llegada del Salvador sin igual.
La estrella más brillante guiaba los pasos,De aquellos que buscaban el niño en los brazos.Los pastores, sencillos y llenos de fe,Admiraban al infante que acunaba María, su madre, con amor y con gratitud.
Magos de tierras lejanas, con sabios dones,Traían incienso, mirra y oro en sus caravanas.Adoraban al niño, al Rey de reyes,Y sus corazones llenaban de bendiciones eternas.
En aquel nacimiento tan maravilloso,La paz y la alegría inundaban los corazones ansiosos.El amor de Dios se manifestaba en cada rincón,Y el mundo entero se llenaba de salvación.
Esperanza de los humildes, consuelo de los corazones,Jesús, nuestro Salvador, irradiaba bendiciones.Su vida y enseñanzas nos guían en este caminar,Hacia la luz divina que nunca dejará de brillar.
En esta Navidad, recordemos aquel momento,Donde la esperanza renació en un humilde asiento.Celebremos el nacimiento de Jesús, nuestro Salvador,Y vivamos siempre en su amor y con gratitud por su amor.
El nacimiento de Jesús
En un humilde establo, en una cuna de heno,nació aquel niño que traería el gran alivio,envuelto en pañales, rodeado de amor sincero,el Salvador del mundo, el Rey del universo.Sus padres, humildes y llenos de gratitud,con asombro miraron este regalo de virtud,un niño que traería la paz a la humanidad,con su luz y su amor, en tiempos de oscuridad.Los ángeles en el cielo cantaron dulces cánticos,anunciando el nacimiento del niño más único,los pastores, con reverencia, llegaron al lugar,donde encontraron al niño, a Jesús, a adorar.Los reyes magos, guiados por una estrella brillante,viajaron desde lejos, cargados de regalos elegantes,oro, incienso y mirra, ofrecieron a aquel niño especial,reconociendo su divinidad y su propósito celestial.El nacimiento de Jesús es motivo de alegría y amor,nos recuerda el poder de la fe y esperanza en nuestro interior,su vida nos enseña a caminar en el camino de la bondad,a amar y perdonar, en cualquier adversidad.Que en esta Navidad, sintamos en nuestro corazón,la luz que Jesús trajo, la paz y la redención,recordemos su nacimiento con gratitud y devoción,y sigamos su ejemplo, compartiendo amor y compasión.Porque el niño Jesús, con su nacimiento humilde y divino,nos muestra el camino hacia un mundo mejor y genuino,donde el amor reine y las diferencias se borren,donde la esperanza florezca y los corazones se renueven.Así, en este tiempo sagrado de Navidad,recordemos el nacimiento que cambió la humanidad,y demos gracias siempre por el regalo de Jesús,que trae consuelo y paz, en cada amanecer y atardecer azul.
El Nacimiento de Jesús
En una noche estrellada, en un humilde portal,
La esperanza del mundo llegó a este mortal.
Un niño divino, con luz celestial,
Un regalo del Padre, un amor sin igual.
Los ángeles cantaban con alegría y fervor,
Anunciando al mundo el nacimiento del Salvador.
Los pastores se acercaron con humildad y fe,
Rindiendo homenaje al Rey que vino a nacer.
Los Magos guiados por una estrella en el cielo,
Ofrecieron sus dones con humilde desvelo.
Oro, incienso y mirra, en señal de rendición,
Adorando al niño con su devoción.
María y José, emocionados y admirados,
Cuidaron del niño con amor bien abrazados.
En un pesebre de paja, en un rincón sencillo,
El Salvador del mundo comenzó su camino.
En Belén, en aquel portal tan modesto,
Nació la esperanza, el amor y el resto.
Jesús, el niño divino, el hijo de Dios,
Vino al mundo a traernos paz y redención.
En esta Navidad, recordemos su amor,
Celebremos su nacimiento con fervor.
Recibamos su regalo, su salvación eterna,
Y vivamos con gratitud cada luz encendida.
El nacimiento de Jesús
En un humilde pesebre, en una fría noche de Belén,
Un niño vino al mundo, llenando al mundo de bien.
La estrella más brillante en el cielo anunciaba
La llegada del Mesías, la esperanza que nunca acababa.
María, madre amorosa, con su hijo en brazos,
José, hombre fiel, protegiendo sus pasos.
Los animales en silencio, contemplan ese ser especial,
Mientras los pastores llegan para adorarlo con humildad.
Ángeles entonan un cántico celestial,
El glorioso nacimiento de Jesús, sin igual.
La buena nueva se esparce por toda la tierra,
El salvador ha llegado, la promesa se devela.
Los reyes magos, guiados por una estrella divina,
Ofrecen regalos al niño, oro, incienso y mirra.
Reconocen en su presencia el poder y la verdad,
El niño Dios ha nacido, la luz de la humanidad.
En ese pesebre sencillo, en Belén, el amor se encarnó,
Jesús, el hijo de Dios, nuestro eterno Salvador.
En su dulce mirada, encontramos la paz y la bendición,
Por siempre honraremos su nacimiento con devoción.
El Nacimiento de Jesús
En un humilde pesebre, en Belén de Judá
Nace el niño más hermoso, la esperanza se hacía realidad
María y José, con amor puro y sin igual
Saben que este niño, al mundo vendrá a salvar.
Los ángeles en el cielo, anunciaron la gran noticia
Los pastores al oírla, sintieron una gran alegría
Corrieron hacia el pesebre, con corazón humilde
Allí encontraron al niño, envuelto en pañales, sin igual belleza.
Los Reyes Magos, guiados por una estrella especial
Llegaron cargando regalos, oro, incienso y mirra sin par
Humbertemente se postraron, reconociendo su divinidad
Adorando al Niño Jesús, con amor y felicidad.
En ese humilde pesebre, Dios se hizo hombre mortal
Para enseñarnos el amor, la paz y la verdad
Su nacimiento trae esperanza, y nos llena de fe
Jesús, el salvador, es el camino que nos guiará hasta el amanecer.
El Nacimiento de Jesús
En un pesebre pequeño y humilde,
en un rincón lleno de amor,
un niño nació, la promesa cumplida,
Jesús, el Salvador, nuestro Señor.
Las estrellas brillaban en el cielo,
el canto de los ángeles se escuchó,
los pastores corrieron al establo,
con alegría y gratitud, se arrodillaron.
María y José miraban con ternura,
a su pequeño hijo envuelto en pajas,
un milagro divino, de luz y dulzura,
la esperanza del mundo en sus manos
Los Reyes Magos, sabios y valientes,
siguieron la estrella que les indicó,
y ofrecieron regalos al Niño Sagrado,
oro, incienso y mirra, su amor mostraron.
En el nacimiento de Jesús,
encontramos redención y paz,
su amor eterno y su sacrificio,
Nazca en nuestros corazones cada día más.
En esta Navidad, celebremos con fe,
el nacimiento de Jesús, nuestro Salvador,
y llevemos su mensaje de amor y esperanza,
que brille en cada rincón, en cada corazón.
¡Gloria a Dios en las alturas!
¡Aleluya por el nacimiento de Jesús!
El Nacimiento de Jesús
En aquel bello y estrellado cielo,
una luz brillante anunciaba un suceso sin igual,
el nacimiento del Hijo de Dios, el Emanuel.
En un humilde establo rodeado de amor,
María y José contemplaban su tesoro,
un niño divino, el Salvador prometido.
Los astros danzaban de alegría en el firmamento,
los ángeles entonaban cantos de gloria,
mientras los pastores acudían al encuentro.
El Niño Jesús, tan tierno y dulce, descansaba,
envuelto en pañales, fuente de esperanza,
la promesa de salvación al mundo personificaba.
Los Reyes Magos guiados por una estrella,
presentaron sus dones con veneración,
oro, incienso y mirra, ofrecidos por devoción.
Y así, en aquel mágico y sagrado momento,
la humanidad encontró la redención,
porque en ese niñito yace el amor divino.
Que la luz de Jesús ilumine nuestro camino,
y que su paz y su gracia nos protejan siempre,
¡Feliz Navidad! Celebrando su nacimiento bendito.
El Nacimiento de Jesús
En aquel Portal, tan humilde y sencillo,
donde la noche se ilumina en fulgor divino,
donde el amor y la esperanza se encuentran,
nace Jesús, el Salvador, el gran Rey de la Tierra.
Las estrellas en el cielo, brillantes y serenas,
anuncian la llegada de la luz más amena,
los ángeles, entonando su dulce melodía,
celebran el milagro que acontecería.
La Virgen María, en su humildad infinita,
acoge en su regazo al Niño que ilumina,
envuelto en pañales, entre pajas reposa,
dispuesto a cargar con los pecados de toda la rosa.
Los pastores, conmovidos y llenos de gozo,
acuden al Santo Lugar, a ofrecer su alborozo,
mientras los Reyes Magos, guiados por una estrella,
llegan con sus regalos, a adorar al Cordero sin igual.
En aquel Portal, la humildad y el amor se entrelazan,
la esperanza y la fe en los corazones se abrazan,
y el mundo se estremece ante tal maravilla,
el nacimiento de Jesús, fuente de paz y maravilla.
Amémonos los unos a otros, siguiendo su ejemplo,
brindemos amor y perdón, en todo momento sencillo,
porque en su nacimiento encontramos la enseñanza,
de vivir con alegría, paz y esperanza.
El nacimiento de Jesús
En una noche estrellada de bello esplendor,
Dios envió a su hijo con gran amor.
En un pequeño pesebre en Belén,
El Salvador del mundo nació también.
Los ángeles cantaron con alegría,
Anunciando la buena nueva aquel día.
La luz divina iluminaba un establo,
Mientras María y José velaban al niño amable.
Los pastores en el campo recibieron señal,
De que el Mesías había llegado a este lugar especial.
Con emociones y reverencia corrieron hacia allí,
Y encontraron al niño Jesús, el Rey por siempre allí.
Los sabios de Oriente llevaron regalos preciosos,
Adorando al niño y reconociéndolo glorioso.
El nacimiento de Jesús nos trae esperanza,
Él es el camino, la verdad y la vida, y nos alcanza.
En esta Navidad, dejemos que su luz brille en cada corazón,
Recordando el maravilloso regalo de Dios, su hijo, nuestro redentor.
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Para vivir entre nosotros aquí en la tierra
Jesús, nuestro Salvador y Señor
Nació en esa santa mañana
Para salvarnos de nuestro pecado y vergüenza
Y para mostrarnos el gran amor de Dios
Bajó del cielo arriba
Para vivir entre nosotros aquí en la tierra
Y que nos enseñe a amar
Y para mostrarnos el camino al cielo
¡Qué maravilloso regalo Él da
Para que tengamos vida eterna
y conocer los gozos de su amor
Y la paz que Él ofrece
Van Castillo
En el pesebre, el bebé dormía
Jesús nació en una noche silenciosa
Todo estaba en calma, todo estaba brillante
Las estrellas brillaban intensamente
el mundo estaba en paz
Por un momento, todo estaba bien
En el pesebre, el bebé dormía
Y el mundo estaba a sus pies
Armando Montes
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Porque El es nuestro Señor y Salvador
Jesús es la luz del mundo
El es la esperanza de toda la humanidad.
Él nació para salvarnos de nuestro pecado.
Y para mostrarnos el camino a la vida eterna
Él es el Príncipe de la Paz.
Y el Rey de Reyes
Y siempre lo amaremos
y seguir sus enseñanzas
Porque El es nuestro Señor y Salvador
¡Y alabamos su nombre para siempre!
Julia Rojas
Para mostrarnos el camino
Jesús, nuestro salvador
Nacido en este día
En un mundo de pecado
Para mostrarnos el camino
vino a cumplir
La profecía anunciada
Y sálvanos de nuestra
Condenación eterna
el es la luz
En la oscuridad
La esperanza para todos
Quien cree en el
En este día
Nosotros celebramos
El nacimiento de nuestro Señor
y dar gracias
Por todo lo que ha hecho
Y todo lo que hará
Bernardina Castillo
Y recuerda el regalo
Nació en un establo.
Entre los animales y el heno
Pero había algo diferente
Sobre este bebé
Los cielos se abrieron
Y los ángeles comenzaron a cantar
Toda la creación se inclinó
Maravillado por este Rey
Él vino a salvarnos de nuestro pecado.
Y para mostrarnos el camino
Para tener vida eterna
Y vivir con El algún día
Así que alegrémonos todos
En esta noche santísima
Y recuerda el regalo
¡Que Dios nos dio en Su Hijo!
Puratani Galvez