Generador de poemas sobre las mandarinas y su amor
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Amor en Mandarinas
Las mandarinas dulces y jugosas,en su piel naranja dorada,guardan un amor que maravilla,una historia encantada.
En un huerto mágico florecieron,dos mandarinas, almas gemelas,sus destinos se entrelazaron,en un amor sin fronteras.
Se encontraron en tierra fértil,bajo el cálido sol del amanecer,sus corazones latían fuertes,como la brisa que soplaba al caer.
Sus jugos se mezclaron en un beso,donando sabores de felicidad,sus pulpas se fusionaron con ternura,en un acto de amor y lealtad.
Sus cáscaras entrelazadas,eran testigos de aquel amor,las mandarinas se daban consuelo,en cada beso y cada sabor.
Pero un día llegó el otoño,y el árbol tembló de dolor,las mandarinas fueron separadas,por manos de cosechadores.
Una fue llevada a un hogar amable,mientras la otra sufría en el mercado,el destino parecía cruel e injusto,y el amor parecía desmoronado.
Pero su amor no podía ser vencido,la magia estaba dentro de su ser,la mandarina en el hogar amable,buscó a su amada sin desfallecer.
Y así fue como se reencontraron,en un cesto de frutas bajo la luna,sus cáscaras se abrazaron fuerte,y sus jugos se mezclaron en fortuna.
Hoy las mandarinas siguen juntas,en un plato lleno de gratitud,su amor perdura en cada bocado,en cada dulce y mágica virtud.
Las mandarinas demostraron al mundo,que el amor puede romper cualquier barrera,que incluso las frutas tienen corazón,y pueden escribir su propia hermosa ceguera.
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Mandarinas y su amor
Mandarinas y su amor
los he visto colgados,
mandarinas,
mandarinas,
luciendo como pequeñas linternas
en los arboles.
Los he visto en los mercados,
amontonados en pirámides,
y los he visto en cuadros,
bodegón contra un fondo
de verde y oro.
pero nunca los he visto
como los veo ahora,
en la luz de la madrugada,
brillando como carbones
en un lecho de cenizas.
Jamas los he visto a ellos
como los veo ahora,
en las manos de mi amor,
quien me los ofrece
con una sonrisa.
Eloísa Ortega
Pero siempre volveré
Cuando veo mandarinas,
no puedo evitar amarlos
Por su dulce olor
y su delicado sabor
No puedo resistir su tentación.
Para meterlos en mi boca
Uno a uno
son mi fruta favorita
Y no puedo tener suficiente
Podría comerlos todo el día.
y nunca te canses
de su jugosa bondad
Pero sé que debo resistir
Porque hay otras frutas para probar
Y no quiero perderme
En toda la delicia
El mundo tiene para ofrecer
Pero siempre volveré
A mi primer amor
el mandarín
Y siempre anhelo
Su dulce, delicia
Aitor Marin
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pienso en la felicidad
Cuando pienso en mandarinas
pienso en el amor
Pienso en su dulce olor
pienso en su delicado sabor
pienso en su bonito color
Pienso en su forma redonda
Pienso en cómo me hacen sentir
pienso en la felicidad
me encantan las mandarinas
son mi fruta favorita
los puedo comer todo el dia
y nunca te canses
me encanta su dulzura
me encanta su olor
me encanta su bonito color
me encanta su forma redonda
Siempre amaré las mandarinas
son la mejor fruta
nunca me cansaré de ellos
Siempre anhelaré su dulzura.
Siempre amaré su olor.
Siempre amaré su bonito color.
Siempre me encantará su forma redonda.
Mateo Calvo
Con tu sabor ácido y agrio
yo
No puedo evitar amarte,
mandarinas.
tu carne dulce y jugosa,
Tu sabor agrio y ácido,
No puedo tener suficiente de ti.
Me encanta la forma en que mancha mis dedos
Con tu tono naranja brillante,
Me encanta la forma en que haces que mi boca se arrugue
Con tu sabor ácido y agrio.
No puedo evitar amarte,
mandarinas.
Eres la merienda perfecta,
El trato perfecto,
No puedo tener suficiente de ti.
Fidel Benitez
te antojo, mandarinas
Las mandarinas son el fruto del amor.
El color de la pasión, el sabor del deseo.
No puedo tener suficiente de tu dulzura
Anhelo tu carne jugosa, necesito tu fuego
mandarinas, mandarinas
El fruto de mi deseo
No puedo vivir sin tu amor
Te necesito, mandarinas
mandarinas, mandarinas
El fruto de mi pasión
No puedo resistir tu tentación
te quiero mandarinas
mandarinas, mandarinas
El fruto de mi obsesión
No puedo tener suficiente de tu dulzura
te antojo, mandarinas
Amadeo Suarez