5 Poemas sobre la Espera

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Esperando el Amor

En la eterna espera del amor me encuentro,anclada en la quietud de mis pensamientos,mi corazón palpita al compás de los segundos,anhelando sentir el amor en mis adentros.

La espera se convierte en un vaivén de emociones,un remolino de sueños y vislumbres de expectativas,donde cada instante se llena de ilusiones,y el corazón late con fuerza desmedida.

Espero, paciente, el encuentro que llegaría,ese momento tan ansiado de conexiones divinas,donde dos almas se unen sin medida,entregando al amor todo lo que día a día se conciba.

Las horas y los días parecieran eternizarse,mientras la esperanza se aferra a mi ser,pero mi corazón no deja de anhelar amarse,de encontrar en su camino a ese ser tan querer.

En cada amanecer mi espera se renueva,y en cada atardecer el deseo se acrecienta,pues sé que en algún momento se dará la cita,la fusión de dos almas en su danza lenta.

Mientras tanto, en esta espera incierta,me abrazo a la magia de los sueños y esperanzas,confío en que el destino me muestre la puerta,y que el amor llegue a mí con esperas escasas.

Así, en la dulce espera, aprendo y crezco,valoro cada instante que la paciencia me regala,porque sé que cuando el amor llegue deshecho,será la recompensa más hermosa y real

La espera eterna

En el silencio afable de la noche,

se esconde aquel suspiro de esperanza.

El corazón anhelante que en su pecho,

guarda el deseo de una dulce bonanza.

La espera, como un mar calmo y sereno,

nos lleva entre sus olas de incertezas.

Es un suspiro que se solapa en el tiempo,

y nos sumerge en un mar de tristes penas.

Pero en cada instante de incierta espera,

se alza la esperanza con fuerza y brío.

Con el sol radiante que cada mañana saluda,

nuestro sueño se despierta en desafío.

La espera, camino de amor y pasión,

es la aventura que nos hace crecer.

Con cada latido, nuestra alma se enciende,

y el anhelo se transforma en un poderoso ser.

Y así, mientras esperamos en suspenso,

la vida nos invita a sonreír.

Pues en cada espera, hay un regocijo inmenso,

y en cada sueño, un nuevo mundo por descubrir.

Esperando

En la noche estrellada y sin final,

mi corazón se encuentra a la espera,

anhelando el calor de tu mirada,

que ilumine mi vida, sin ninguna barrera.

En el silencio de mis pensamientos,

mi alma suspira por tu presencia,

como un ave que anhela el alba,

ansiosa por encontrarse en la trascendencia.

La espera se vuelve un dulce tormento,

que a veces aprieta mi pecho soñador,

pero sigo aguardando, paciente y sereno,

porque sé que el destino nos une con ardor.

La espera es un abrazo eterno,

que acaricia mi espíritu en soledad,

pues sé que en tus brazos me perderé,

cuando llegue el momento de nuestra verdad.

Sigo esperando, con fe inquebrantable,

confiando en que el universo conspira,

para que nuestras almas se encuentren,

y juntos, escribamos nuestra historia más lira.

Mientras tanto, seguiré esperando,

envuelto en sueños y anhelos de ti,

porque sé que la espera valdrá la pena,

y nuestro amor florecerá, como un jardín en abril.

La espera

En el silencio de la noche estrellada,
mi corazón se sumerge en la espera,
un suspiro en el viento se ha quedado,
anhelando el momento que me libera.

Atravieso los días con paciencia,
navegando en mares de incertidumbre,
esperando aquellos rayos de esencia,
que llenen mis días de dulce pesadumbre.

La espera se alarga en cada segundo,
dibujando sueños en mi mirada,
como el sol que se oculta en el mundo,
la esperanza crece y no se deshaga.

Espero, espero con ilusión y fe,
porque sé que ese encuentro ha de llegar,
en el justo momento en que todo esté,
mi espera se convertirá en un caminar.

Y mientras tanto, seguiré aguardando,
en esta danza de la vida y el tiempo,
con el corazón lleno de esperanza palpando,
hasta que el destino trace su firmamento.

La espera es un suspiro que fluye lento,
resiliente, como la flor que aguarda primavera,
y aunque a veces duela, es un alimento,
que fortalece el alma en su espera eterna.

La espera

En la quietud de la mañana,mi corazón anhela,esperando paciente,la llegada de aquello que espera.

Días eternos pasan,como hojas al viento,la espera se hace larga,pero mi fe no desvanece.

El sol se pone y se levanta,las estrellas brillan en el cielo,mi alma se llena de esperanza,al saber que pronto estaré completo.

Los segundos se vuelven horas,los minutos parecen años,pero sé que en algún momento,mis sueños se harán realidad.

La espera es un dulce tormento,que agita mi ser,pero sé que cuando llegue,valdrá la pena todo el esperar.

Y en el momento esperado,la emoción se desborda,mi corazón se llena de alegría,al ver que la espera ha terminado.

La espera nos enseña,a ser pacientes y persistentes,a confiar en el destino,y a encontrar belleza en la espera.

Así que en medio de la expectativa,no olvides apreciar el presente,porque aunque la espera sea larga,la vida sigue su curso constante.

La dulce espera

En la quietud del tiempo detenido,

mi corazón anhela con fervor,

esperando el momento prometido,

en el que vuelvas a ser mi amor.

Las horas se alargan sin cesar,

los minutos parecen eternos,

y mi alma empieza a suspirar,

esperando tus besos tiernos.

En cada suspiro que se escapa,

se entrelazan mis sueños y deseos,

y el eco de tu voz que resbala,

me transporta a mágicos anhelos.

La espera es un canto de paciencia,

que se convierte en porvenir,

donde el amor encuentra su esencia,

y el corazón aprende a resistir.

En cada latido, susurra la esperanza,

de que pronto estarás a mi lado,

rindiendo al fin esta danza,

en la que el amor es el legado.

Así que espero, con el corazón abierto,

con fe y con un amor incondicional,

porque cada día del futuro incierto,

me acerca más a tu llegada celestial.

La espera interminable

En el silencio de la espera,

mis pensamientos se despiertan,

anhelando el encuentro prometido,

que mi corazón siempre ha buscado.

Los minutos se vuelven eternos,

las horas se desvanecen lentamente,

mi paciencia se pone a prueba,

pero mi esperanza se mantiene constante.

El tic-tac del reloj parece burlarse,

mientras el destino juega conmigo,

pero mi fe se eleva hacia las alturas,

con la certeza de que llegarás conmigo.

La espera se convierte en un sendero,

donde mi amor se fortalece y crece,

te imagino a cada paso que das,

y siento lazos invisibles que nos unen.

En cada suspiro hay un deseo,

en cada mirada está la ilusión,

mi corazón late al ritmo del reloj,

esperando el momento de tu aparición.

Y finalmente, el día llega,

la espera ha llegado a su fin,

abro los brazos para recibirte,

y en ese instante, el mundo sonríe.

La espera valió la pena,

porque ahora estás a mi lado,

y juntos escribiremos nuestra historia,

libres de toda espera, enamorados.

Espera

En el bálsamo de la paciencia me refugio,

entre susurros de la vida que se dilata.

Espero con la mirada perdida en el horizonte,

sabiendo que cada instante tiene su encanto.

El tiempo pasa lento cuando espero,

y sin embargo, se desliza veloz entre mis manos.

Aguardando ese momento de encuentro,

en que mis sueños se funden en un abrazo.

La espera es una danza entre la razón y el corazón,

una melodía que se entrelaza en la piel.

Es la promesa de un futuro que se acerca,

y que en cada latido de mi pecho se revela.

Cada segundo que transcurre es un suspiro,

una partícula de esperanza que se añade al camino.

Sé que el destino me depara una dulce sorpresa,

y en el fluir del tiempo, confío y respiro.

Estaré aquí, paciendo la esperanza,

tejiendo sueños con hilos de ilusión.

Sabiendo que el amor se encuentra al final de este trayecto,

amarrado al susurro de tu voz y mi canción.