Generador de poemas cristianos para viernes santo
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Viernes Santo en la Cruz
En este Viernes Santo, dolor y amor se dan la mano,
En una cruz, Jesús nos mostró su amor sobrehumano.
Desde Nazaret hasta el Calvario, su camino fue marcado,
Su misión divina en la cruz sería revelado.
El sacrificio perfecto
Con amor infinito, Jesús se entregó por cada pecado,
En su corazón, nuestros nombres fueron grabados.
En aquel Gólgota, Él soportó el dolor y el desamparo,
Para salvar a la humanidad de todo mal y pecado.
La cruz, símbolo de gracia y redención
La cruz que un día fue símbolo de vergüenza y maldición,
Hoy es señal de amor, gracia y salvación.
En la muerte de Jesús, encontramos vida eterna,
En su sacrificio, la oportunidad de una nueva senda.
Viendo su amor, encontramos esperanza
En este Viernes Santo, contemplamos su amor sin medida,
Su sacrificio en la cruz, corazones transforma y vida convida.
No hay oscuridad ni pecado que su amor no pueda cubrir,
En Jesús resplandece una luz que nada puede destruir.
Redención y perdón encontramos en la cruz
En través de la cruz, se rompió el poder del pecado,
El camino hacia el Padre por Jesús ha sido allanado.
En este Viernes Santo, encontramos perdón y vida plena,
Porque en la muerte de Jesús, nuestra deuda fue completa y llena.
Viernes Santo
En el Viernes Santo, recordamos tu sacrificio
Tu amor infinito, que nos dio vida y alivio
En la cruz, cargaste nuestras penas y pecados
Derramando tu sangre, nos has redimido.
Oh dulce Jesús, el cordero inmolado
Tu muerte nos ha dado esperanza y perdón
Con humildad y amor, llevaste nuestro fardo
Para abrirnos las puertas del Reino del Señor.
En este día santo, nos postramos a tus pies
Agradecidos por la gracia que nos has brindado
Tu entrega incondicional, nunca lo merecimos
Pero tu amor nos ha transformado.
Viernes Santo, día de reflexión y oración
Contemplamos tu sufrimiento y sacrificio supremo
Nos arrepentimos y buscamos tu misericordia
Renovando nuestros corazones con devoción y anhelo.
Que en este Viernes Santo, recordemos siempre
Tu amor eterno y sacrificio redentor
Que nuestra fe sea firme y nunca se quiebre
Siguiendo tus enseñanzas con fervor.
Viernes Santo
En este Viernes Santo,recordemos la pasión del Señor,cuando en la cruz murió,demostrando su amor.Fue en ese día oscuro,que cargó con nuestros pecados,cada latigazo, cada insulto,por nosotros fue soportado.Sus manos fueron clavadas,sus pies también heridos,por cada uno de nosotros,por nuestros corazones contritos.En su último aliento,pronunció palabras de perdón,mostrando su misericordia,y su grandeza en acción.En ese Viernes Santo,donde el cielo se oscureció,recordemos su sacrificio,y el precio que Él pagó.Entregó su vida por amor,para salvarnos del pecado,y en su resurrección,nuestra esperanza ha sido sellada.En este Viernes Santo,recordemos su sacrificio,y vivamos en gratitud,por su amor tan infinito.Que en nuestra vida diaria,reflejemos su luz y amor,y llevemos su mensaje,a todo el mundo, con gran fervor.En este Viernes Santo,elevemos nuestra voz,agradezcamos a Cristo,por su sacrificio y su gran amor.Demos gracias a Jesús,por su intercesión en la cruz,y celebremos su resurrección,con fe y gratitud hacia Él, nuestro Redentor.
Viernes Santo
En este día sagrado y triste,
recordamos el amor que Jesús nos diste.
En la cruz Él murió por nuestros pecados,
su sacrificio eterno y divino ha quedado.
Con humildad y devoción,
nos acercamos a esta conmemoración.
Nuestras almas se llenan de gratitud,
porque en la cruz encontramos plenitud.
Jesús, el Cordero perfecto y santo,
padeció por nosotros tanto.
Su sangre derramada en el madero,
lavó nuestros pecados sin peros.
En la cruz, se cumplió la profecía,
donde Jesús mostró su gran valentía.
En medio del dolor y sufrimiento,
nos dio vida, amor y alivio en el tormento.
En este Viernes Santo recordamos su agonía,
y nos llenamos de esperanza y alegría.
Agradecemos por su sacrificio sin igual,
y con amor, Él nos quiere siempre abrazar.
Así que elevemos alabanzas a nuestro Señor,
quien murió por nosotros con gran fervor.
En cada suspiro, en cada latido de nuestro corazón,
recordamos su amor sin condición.
Viernes Santo: El sacrificio de amor
En el Viernes Santo, la Cruz se levanta,
La sangre derramada, Jesús nos entrega.
En el Calvario, su cuerpo lacerado,
Un sacrificio de amor, por sus hijos amados.
En ese día sombrío, el cielo se oscureció,
El Salvador entregó su vida, el precio pagó.
Llevando sobre sí el peso del pecado,
Para ofrecernos redención, nos dio su amor sagrado.
Oh, dulce Jesús, en la cruz te clavaron,
Con amor infinito, nuestros pecados soportaste.
Tus manos y pies, heridos y quebrantados,
Por nosotros, oh Cristo, fuiste crucificado.
En ese Viernes santo, el velo se rasgó,
La esperanza renació, el camino nos mostró.
La muerte vencida, la salvación obtenida,
Por tu gracia divina, podemos tener vida eterna.
En la oscuridad, brilla tu luz redentora,
Tu amor inmenso, nos envuelve con ternura.
Nos has rescatado de la esclavitud del pecado,
En el Viernes Santo, tu amor fue manifestado.
En este día santo, con gratitud y reverencia,
Recordamos tu sacrificio, tu inmenso amor y paciencia.
Viernes Santo, día de reflexión profunda,
Te alabamos, Jesús, por tu entrega fecunda.
Viernes Santo: El Sacrificio de Amor
En este día tan especial, Recordamos el amor sin igual, El sacrificio que Cristo hizo por cada uno, Entregando su vida en la cruz del Calvario.
En el Viernes Santo se refleja su amor, Un amor que nos dejó sin temor, Con humildad y mansedumbre, Cristo pagó el precio de nuestra redención.
Sus manos clavadas, su cuerpo herido, La corona de espinas, su sacrificio admirable, Cristo, nuestro Salvador, el Cordero divino, Por sus llagas fuimos sanados, ¡qué maravilla!
En este día, llenos de gratitud, Recordamos su sufrimiento y su actitud, Perdonó a quienes lo crucificaron, Y así nos enseñó el verdadero amor.
Viernes Santo, día de reflexión y recogimiento, En nuestra vida dejemos espacio al arrepentimiento, Agradezcamos a Jesús por su amor tan ferviente, Y vivamos conforme a su voluntad y enseñanzas divinas eternamente.
Viernes Santo
En este día tan especial,
recordamos el sacrificio sin igual.
En la cruz murió el Hijo de Dios,
entregando su vida a favor de nosotros.
En la hora más oscura y sombría,
brilla la luz de su amor y valentía.
Jesús cargó con nuestro pecado,
en la cruz quedó todo redimido y pagado.
Es Viernes Santo, día de reflexión,
donde contemplamos su grande aflicción.
Miramos el sufrimiento y el dolor,
pero también la esperanza y el perdón.
Desde la cruz Jesús nos enseñó,
a perdonar y amar como Él lo hizo.
Nos mostró el camino de la salvación,
conquistando a la muerte con su resurrección.
Por eso, en este viernes santo,
brindemos alabanzas a Cristo el Santo.
Agradezcamos por su amor sin fin,
y recordemos que siempre estará cerca de ti.
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El es nuestro Señor y nuestro Salvador
fue traicionado por un beso
Y condenado a morir
Él tomó nuestros pecados sobre sus hombros
Y sangró y murió
Pero al tercer día resucitó
Él venció la muerte y el pecado
Y Él se sienta ahora a la mano derecha
Del Padre, nuestro Rey
Él es el Cordero que fue inmolado
Aquel que murió por nosotros
El es nuestro Señor y nuestro Salvador
Y lo alabamos y lo adoramos
¡Porque Él es digno de toda nuestra alabanza!
Clarisa Perez
Para expiar nuestros pecados
Él era el cordero perfecto.
impecable y puro
fue llevado al matadero
Para expiar nuestros pecados
Su sangre fue derramada
Para que pudiéramos ser libres
El es el Cordero de Dios
Quien quita el pecado del mundo
En este Viernes Santo
Recordamos su sacrificio
Y dar gracias por su regalo de la vida
Ángel Mendoza
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El lava nuestros pies
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El lava nuestros pies
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El lava nuestros pies
Y somos perdonados
El lava nuestros pies
y somos libres
Gracia Costa
perdonado y libre
vino a salvarnos
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En la cruz ese día
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Para que podamos vivir
Y ahora estamos de pie
perdonado y libre
Alabado sea Jesús
Nuestro Salvador y Señor
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¡Y para siempre!
Nicolás Abad
Para que podamos vivir
El Viernes Santo recordamos
El día que murió nuestro Salvador
Él dio su vida por nosotros
Para que podamos vivir
Él tomó nuestro pecado y vergüenza
Y llevó nuestro dolor
sangró y murió
Para que podamos ser libres
ahora nos regocijamos
En este día de victoria
Porque Jesús ha vencido a la muerte
¡Y Él vive para siempre!
Antonio Arias
