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Los Tres Cerditos
En un lejano lugar, hace mucho tiempo atrás,
Tres cerditos vivían en paz, sin preocupación.
El primero, construyó su casa de paja,
Rápido y sin esfuerzo, alegre cantaba.
El segundo, decidió su hogar de madera levantar,
Más fuerte y duradero, para así descansar.
Pero el tercero, con sabiduría y visión,
Construyó su morada con sólida construcción.
Vino el lobo feroz, sopló y sopló,
La casa de paja en pedazos derribó.
Los cerditos asustados, corrieron en pánico,
Refugiándose en la casa de madera, con un nudo en el estómago.
El lobo soplando fuerte, la casa también cayó,
Pero los cerditos no perdieron la esperanza, la fortaleza no flaqueó.
Finalmente, llegaron a la casa de ladrillo,
La más resistente, donde no había peligro ni enemigo.
El lobo sopló con rabia, pero nada pasó,
Los cerditos estaban seguros, felices y a salvo, al fin lo lograron.
Este cuento nos enseña, con una valiosa lección,
Que la verdadera fortaleza, viene de la planificación y la construcción.
Los tres cerditos
Érase una vez, en un pequeño lugar,
tres cerditos que querían construir su hogar.
El primero, con prisa, levantó su casita de paja,
sin pensar en los peligros que le acechaban con saña.
El segundo, más astuto, optó por la madera,
una opción más firme pero no la más certera.
Construyó su hogar con cuidado y ahínco,
sin saber que pronto vendría un conflicto.
El tercero, el más juicioso y sabio,
eligió la piedra como su resguardo amable.
Construyó su hogar con paciencia y esmero,
preparándose para cualquier tiempo severo.
Llegó el temible lobo, sopló muy fuerte,
y la casita de paja no resistió su suerte.
El cerdito huyó, asustado y derrotado,
en busca de sus hermanos que habían rezagado.
Juntos se refugiaron en la choza de madera,
pensando que los salvaría de cualquier quimera.
Pero el lobo no cedió, su furia no cesaba,
y la casa de madera tampoco resistía su embestida.
Finalmente, el lobo llegó a la casa de piedra,
pero su intento de destruir fue en vano yerra.
Los tres cerditos se mantuvieron firmes y unidos,
mientras el lobo, frustrado, se dio por vencido.
En esta historia, la moraleja es clara,
la fuerza y unión siempre son la mejor vara.
Construyamos nuestras vidas con sabiduría,
para enfrentar cualquier adversidad con valentía.
Los Tres Cerditos
Hubo una vez tres cerditos tan valientes,que decidieron hacer sus propias viviendas diferentes.El primero, apurado, construyó una casita de paja,pensando que sería suficiente y no habría nada que amenazara.
El segundo cerdito, más hábil en la tarea,decidió edificar con madera su morada,siendo consciente de que sería más segura,y se protegería de cualquier criatura.
Pero el tercer cerdito, el más sabio de los tres,decidió construir su hogar con ladrillos que no cedieran,trabajó con esmero y dedicación,confiando en que su casa sería una fortaleza sin comparación.
Pasó el tiempo, y el lobo feroz apareció,deseando a los cerditos como su sabroso festín,llegó a la primera casa de paja y sopló con gran furor,derrumbándola en un abrir y cerrar de ojos, sin mucho esfuerzo ni temor.
El cerdito escapó rápidamente para no ser devorado,y corrió hacia la casa de madera creyendo que estaría a salvo,pero el lobo sopló con más fuerza, haciendo temblar el lugar,y la casa de madera se desmoronó sin poderse resguardar.
Finalmente, el valiente tercer cerdito llegó al rescate,el lobo se acercó a su hogar, pero no pudo penetrar,los ladrillos resistieron el embate,y la casa se mantuvo firme, sin titubear.
El lobo, frustrado y derrotado,se marchó sin poder cumplir su propósito,los tres cerditos aprendieron la importancia de la perseverancia,y que con esfuerzo y sabiduría se encuentra la victoria en cualquier circunstancia.
Así termina esta historia de lección y verdad,donde la valentía y la inteligencia son triunfantes en su finalidad.Los tres cerditos demostraron su valor,y a partir de entonces vivieron en calma y sin temor.
Hermosos Poemas de los Tres Cerditos que pueden gustarte:
Los tres cerditos estaban a salvo
Érase una vez
Había tres cerditos
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eran tan lindos y pequeños
Pero tuvieron que enfrentarse al lobo grande y feroz
El primer cerdito construyó una casa de paja
El segundo cerdito construyó una casa de palos.
El tercer cerdito construyó una casa de ladrillos.
El lobo derribó la casa de paja
El lobo derribó la casa de palos
Pero el lobo no pudo derribar la casa de ladrillos
Los tres cerditos estaban a salvo
Y ellos vivieron felices para siempre
Oria Contreras
Y derribó la casa del primer cerdo
Érase una vez,
Había tres cerditos,
que se dispusieron a construir sus casas,
Cada uno usando un material diferente.
El primer cerdito usó paja,
El segundo usaba palos,
Y el tercero usaba ladrillos.
Llegó el lobo feroz,
Y derribó la casa del primer cerdo,
Y voló la casa del segundo cerdo,
Pero no pudo derribar la casa del tercer cerdo.
Los tres cerditos estaban a salvo,
Y ellos vivieron felices para siempre.
Amori Izquierdo
Algunos Poemas de los Tres Cerditos cortos:
Había tres cerditos
Érase una vez,
Había tres cerditos.
Eran tan lindos y pequeños,
Viviendo en sus casitas de paja.
Un día, apareció un lobo feroz.
Resopló y resopló,
Y derribó sus casas.
Los tres cerditos se escaparon,
Pero no tenían miedo.
Sabían que podían reconstruir,
Y lo hicieron, esta vez con ladrillos.
El lobo feroz volvió,
Pero no pudo entrar.
Los tres cerditos estaban a salvo,
Y ellos vivieron felices para siempre.
Lope Delgado
El primer cerdo se llamaba jack
Los tres cerditos
Érase una vez tres cerditos.
Eran tan lindos y tan pequeños.
El primer cerdo se llamaba Jack.
El segundo cerdo se llamaba Jill.
El tercer cerdo se llamaba John.
Todos vivían juntos en una casa hecha de paja.
Un día, un lobo feroz llegó y voló su casa.
Los tres cerditos huyeron lo más rápido que pudieron.
El primer cerdo corrió a una casa de madera.
El segundo cerdo corrió a una casa hecha de ladrillos.
El tercer cerdo corrió a una casa de piedra.
El lobo feroz llegó a la casa del primer cerdo y lo derribó.
Llegó a la casa del segundo cerdo y la derribó.
Pero cuando llegó a la casa del tercer cerdo, no pudo derribarlo.
Los tres cerditos estaban muy felices.
Vivieron felices para siempre en su sólida casa de piedra.
El fin.
Solange Pacheco
Hecho de ladrillos y mortero
Érase una vez,
Había tres cerditos,
Eran tan lindos y pequeños,
Y les encantaba jugar.
Un día, construyeron una casa,
Hecho de paja y palos,
Pero vino el lobo y lo derribó,
Y tuvieron que empezar de nuevo.
Esta vez, construyeron una casa,
Hecho de ladrillos y mortero,
Y el lobo no pudo entrar,
Y ellos vivieron felices para siempre.
Yerik Mendez
